Nosotros, en cambio, no pasaremos la medida cuando defendamos nuestra autoridad, pues respetaremos la medida que nos fijó Dios, -que todo lo mide bien-, al hacernos llegar hasta ustedes.
No nos entrometemos entre ustedes como aquellos que no han sabido cómo llegar, pues somos los que les llevamos el Evangelio de Cristo.