No quiero hablar de un fracaso de las promesas de Dios, porque no todos los israelitas son Israel,
como tampoco los descendientes de Abrahán eran todos hijos suyos. Pues le fue dicho: Los hijos de Isaac serán considerados tus descendientes.
O sea, que no basta ser hijo suyo según la carne para ser hijo de Dios; la verdadera descendencia de Abrahán son los hijos que le han nacido a raÃz de la promesa de Dios.