¿No crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mÃ? Cuando les enseño, esto no viene de mÃ, sino que el Padre, que permanece en mÃ, hace sus propias obras.
el EspÃritu de Verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes lo conocen, porque está con ustedes y permanecerá en ustedes.