El mismo será su paz. Cuando Asiria invada nuestra tierra y pise nuestro suelo, le opondremos siete pastores, ocho de nuestros jefes.
Con su espada dominará a Asiria, sus armas someterán la tierrra de Nemrod. Asà nos librará de los asirios cuando invadan nuestro territorio y traspasen nuestras fronteras.
Entonces el resto de Jacob será en medio de numerosos pueblos como león entre los animales de la selva, como cachorro entre los rebaños de corderos, que aplasta cuanto encuentra a su paso, y nadie puede arrebatárl su presa.