Me dijo: "Entra y mira las cosas escandalosas que se hacen allÃ".
Entro, observo y veo toda clase de reptiles y animales impuros que estaban grabados a lo largo del muro: todos los inmundos Ãdolos de la casa de Israel.
HabÃa allà setenta hombres, cada uno con su incensario en la mano, y el humo del incienso se elevaba. Eran los ancianos de Israel y entre ellos reconocà a JeconÃas, hijo de Safán.
Entonces me dijo: "Viste, hijo de hombre, ¿no les basta a la casa de Judá con hacer aquà tantas cosas escandalosas? ( ) ¿Van a seguir enojándome? Pero esta vez se les pasó la medida,