A ver si, escuchando el pueblo de Judá el mal que he pensado hacerles, se aparta de su mal camino y puedo yo, entonces, perdonarles su culpa y sus pecados.
bajó al palacio real, donde estaban reunidos todos los ministros. Ahà estaban el secretario Elisama, DalaÃas, GamarÃas, Elnatán, SedecÃas, hijo de HananÃas, y los demás ministros.
Y Miqueas les refirió todo lo que habÃa oÃdo de la lectura pública de Baruc.
Entonces los ministros enviaron a JudÃ, hijo de NatanÃas, a decir a Baruc: «Toma el rollo que has leÃdo y ven.» Baruc tomó el libro y fue donde ellos.
Tomó, pues, JeremÃas otro papel enrollado y se lo entregó a Baruc hijo de NerÃas, el secretario, y le dictó para que anotara todas las cosas que contenÃa el libro quemado por Joaquim, rey de Judá. Y añadió, además, muchas otras cosas del mismo estilo.