Have not I commanded thee? Be strong and of a good courage; be not afraid, neither be thou dismayed: for the LORD thy God is with thee whithersoever thou goest.
Y dieron aviso a David, diciendo: He aquÃ, los filisteos están atacando a Keila, y están saqueando las eras.
Entonces consultó David al Señor, diciendo: ¿Debo ir a atacar a estos filisteos? Y el Señor dijo a David: Ve, ataca a los filisteos y libra a Keila.
Pero los hombres de David le dijeron: He aquÃ, estamos con temor aquà en Judá. ¿Cuánto más si vamos a Keila contra las filas de los filisteos?
Y sucedió que cuando Abiatar, hijo de Ahimelec, huyó a donde estaba David en Keila, descendió con un efod en la mano.
Cuando se avisó a Saúl que David habÃa ido a Keila, Saúl dijo: Dios lo ha entregado en mi mano, pues se ha encerrado entrando en una ciudad con doble puerta y barras.
Y convocó Saúl a todo el pueblo a la guerra, para descender a Keila a fin de cercar a David y sus hombres.
Entonces David dijo: Oh Señor, Dios de Israel, tu siervo ciertamente ha oÃdo que Saúl procura venir a Keila para destruir la ciudad por causa mÃa.
¿Me entregarán en su mano los hombres de Keila? ¿Descenderá Saúl tal como tu siervo ha oÃdo? Oh Señor, Dios de Israel, te ruego que lo hagas saber a tu siervo. Y el Señor dijo: Descenderá.
Entonces David dijo: ¿Me entregarán los hombres de Keila a mà y a mis hombres en manos de Saúl? Y el Señor dijo: Os entregarán.
Se levantó, pues, David con sus hombres, como seiscientos, y salieron de Keila y anduvieron de un lugar a otro. Cuando a Saúl le informaron que David se habÃa escapado de Keila, cesó de perseguirlo.
David se quedó en el desierto en los refugios, y permaneció en la región montañosa en el desierto de Zif. Saúl lo buscaba todos los dÃas, pero Dios no lo entregó en su mano.
Y se dio cuenta David que Saúl habÃa salido para quitarle la vida; y David se encontraba en el desierto de Zif, en Hores.
Y Jonatán, hijo de Saúl, se levantó y fue a donde estaba David en Hores, y le fortaleció en Dios.
Hicieron los dos un pacto delante del Señor; y David permaneció en Hores mientras Jonatán se fue a su casa.
Entonces subieron los de Zif a Saúl en Guibeá diciendo: ¿No está David escondido entre nosotros en los refugios en Hores, en la colina de Haquila que está al sur de Jesimón?
Ahora bien, oh rey, desciende conforme a todo el deseo de tu alma para hacerlo; y nuestra parte será entregarlo en manos del rey.
Y Saúl dijo: Benditos seáis del Señor, porque os compadecisteis de mÃ.
Saúl iba por un lado del monte y David y sus hombres por el otro lado del monte; y David se apresuraba para huir de Saúl, pues Saúl y sus hombres estaban rodeando a David y a sus hombres para apresarlos.
Pero un mensajero vino a Saúl diciendo: Apresúrate y ven, pues los filisteos han hecho una incursión en la tierra.
Regresó entonces Saúl, dejando de perseguir a David, y fue al encuentro de los filisteos; por eso llamaron a aquel lugar la Peña de Escape.
Y subió David de allÃ, y permaneció en los refugios de En-gadi.