Y comenzando su profecÃa, dijo: Oráculo de Balaam, hijo de Beor, y oráculo del hombre de ojos abiertos.
Oráculo del que escucha las palabras de Dios, y conoce la sabidurÃa del AltÃsimo; del que ve la visión del Todopoderoso, caÃdo, pero con los ojos descubiertos.
Lo veo, pero no ahora; lo contemplo, pero no cerca; una estrella saldrá de Jacob, y un cetro se levantará de Israel que aplastará la frente de Moab y derrumbará a todos los hijos de Set.