Y atenderán a lo que tú ordenes y a las obligaciones de toda la tienda, pero no se acercarán a los utensilios del santuario y del altar, para que no mueran, tanto ellos como vosotros.
Y ellos se juntarán contigo, y atenderán a las obligaciones de la tienda de reunión, para todo el servicio de la tienda; pero ningún extraño se acercará a vosotros.
He aquÃ, yo mismo he tomado a vuestros hermanos, los levitas, de entre los hijos de Israel; son un regalo para vosotros, dedicados al Señor, para servir en el ministerio de la tienda de reunión.
Entonces habló el Señor a Aarón: He aquà que yo te he dado el cuidado de mis ofrendas, todas las cosas consagradas de los hijos de Israel; te las he dado a ti como porción, y a tus hijos como provisión perpetua.
Esto será tuyo de las ofrendas santÃsimas preservadas del fuego: toda ofrenda de ellos, aun toda ofrenda de cereal y toda ofrenda por el pecado y toda ofrenda por la culpa, que ellos me han de presentar, será santÃsima para ti y para tus hijos.
Como ofrenda santÃsima la comerás; todo varón la comerá. Cosa santa será para ti.
En cuanto a su redención, de un mes los redimirás, según tu valuación, por cinco siclos en plata, según el siclo del santuario que es de veinte geras.
Y su carne será para ti; asà como el pecho de la ofrenda mecida y la pierna derecha son tuyas.
Todas las ofrendas de lo que es santo, que los hijos de Israel ofrezcan al Señor, las he dado a ti, a tus hijos y a tus hijas contigo, como porción perpetua; es un pacto permanente delante del Señor para ti y para tu descendencia contigo.
Entonces el Señor dijo a Aarón: No tendrás heredad en su tierra, ni tendrás posesión entre ellos; yo soy tu porción y tu herencia entre los hijos de Israel.
Y he aquà que yo he dado a los hijos de Levà todos los diezmos en Israel por heredad, a cambio de su ministerio en el cual sirven, el ministerio de la tienda de reunión.
Y los hijos de Israel no se acercarán más a la tienda de reunión, no sea que carguen con un pecado y mueran.
Sólo los levitas servirán en el ministerio de la tienda de reunión, y ellos cargarán con la iniquidad del pueblo; será estatuto perpetuo por todas vuestras generaciones, y entre los hijos de Israel no tendrán heredad.
Porque el diezmo de los hijos de Israel, el cual ofrecen como ofrenda al Señor, yo lo he dado a los levitas por heredad; por tanto, he dicho en cuanto a ellos: "Entre los hijos de Israel no tendrán heredad."
Y les dirás: "Cuando hayáis ofrecido de ello lo mejor, entonces el resto será contado a los levitas como el producto de la era o como el producto del lagar.