Paul, an apostle of Jesus Christ by the will of God, and Timothy our brother, unto the church of God which is at Corinth, with all the saints which are in all Achaia:
Entonces descendà a casa del alfarero, y he aquÃ, estaba allà haciendo un trabajo sobre la rueda.
Y la vasija de barro que estaba haciendo se echó a perder en la mano del alfarero; asà que volvió a hacer de ella otra vasija, según le pareció mejor al alfarero hacerla.
Entonces vino a mà la palabra del Señor, diciendo:
¿No puedo yo hacer con vosotros, casa de Israel, lo mismo que hace este alfarero?--declara el Señor. He aquÃ, como el barro en manos del alfarero, asà sois vosotros en mi mano, casa de Israel.
En un momento yo puedo hablar contra una nación o contra un reino, de arrancar, de derribar y de destruir;
Mas ellos dirán: "Es en vano; porque vamos a seguir nuestros propios planes, y cada uno de nosotros obrará conforme a la terquedad de su malvado corazón."
"¿Faltará la nieve del LÃbano de la roca agreste? ¿O se agotarán las aguas frÃas que fluyen de tierras lejanas?
"Pues bien, mi pueblo me ha olvidado, queman incienso a dioses vanos, y se han desviado de sus caminos, de las sendas antiguas, para andar por senderos, no por calzada,
convirtiendo su tierra en una desolación, en una burla perpetua. Todo el que pase por ella se quedará atónito y meneará la cabeza.
Entonces dijeron: Venid y urdamos planes contra JeremÃas. Ciertamente la ley no le faltará al sacerdote, ni el consejo al sabio, ni la palabra al profeta. Venid e hirámoslo con la lengua, y no hagamos caso a ninguna de sus palabras.
¿Acaso se paga mal por bien? Pues han cavado fosa para mÃ. Recuerda cómo me puse delante de ti para hablar bien en favor de ellos, para apartar de ellos tu furor.
Por tanto, entrega sus hijos al hambre, y abandónalos al poder de la espada; queden sus mujeres sin hijos y viudas, sean sus maridos asesinados, heridos a espada sus jóvenes en la batalla.
Oiganse los gritos desde sus casas, cuando de repente traigas sobre ellos saqueadores; porque han cavado fosa para atraparme, y han escondido trampas a mis pies.
Pero tú, oh Señor, conoces todos sus planes de muerte contra mÃ. No perdones su iniquidad ni borres de tu vista su pecado; sean derribados delante de ti, en el tiempo de tu ira actúa contra ellos.