Likewise the Spirit also helpeth our infirmities: for we know not what we should pray for as we ought: but the Spirit itself maketh intercession for us with groanings which cannot be uttered.
Y AbÃas durmió con sus padres, y lo sepultaron en la ciudad de David, y su hijo Asa reinó en su lugar. Y el paÃs estuvo en paz por diez años durante sus dÃas.
Y Asa hizo lo bueno y lo recto ante los ojos del Señor su Dios,
porque quitó los altares extranjeros y los lugares altos, destruyó los pilares sagrados, derribó las Aseras,
y ordenó a Judá que buscara al Señor, Dios de sus padres y cumpliera la ley y el mandamiento.
Y Asa salió a su encuentro, y se pusieron en orden de batalla en el valle de Sefata junto a Maresa.
Entonces Asa invocó al Señor su Dios, y dijo: Señor, no hay nadie más que tú para ayudar en la batalla entre el poderoso y los que no tienen fuerza; ayúdanos, oh Señor Dios nuestro, porque en ti nos apoyamos y en tu nombre hemos venido contra esta multitud. Oh Señor, tú eres nuestro Dios; que no prevalezca hombre alguno contra ti.
Y el Señor derrotó a los etÃopes delante de Asa y delante de Judá, y los etÃopes huyeron.
Destruyeron todas las ciudades alrededor de Gerar, porque el terror del Señor habÃa caÃdo sobre ellos; y saquearon todas las ciudades pues habÃa mucho botÃn en ellas.