testificando Dios juntamente con ellos, tanto por señales como por prodigios, y por diversos milagros y por dones del EspÃritu Santo según su propia voluntad.
Porque no sujetó a los ángeles el mundo venidero, acerca del cual estamos hablando.
Pero uno ha testificado en cierto lugar diciendo: ¿Que es el hombre para que de el te acuerdes, o el hijo del hombre para que te intereses en el?
Le has hecho un poco inferior a los angeles; le has coronado de gloria y honor, y le has puesto sobre las obras de tus manos;
Pero vemos a aquel que fue hecho un poco inferior a los ángeles, es decir, a Jesús, coronado de gloria y honor a causa del padecimiento de la muerte, para que por la gracia de Dios probara la muerte por todos.
Porque convenÃa que aquel para quien son todas las cosas y por quien son todas las cosas, llevando muchos hijos a la gloria, hiciera perfecto por medio de los padecimientos al autor de la salvación de ellos.
Porque tanto el que santifica como los que son santificados, son todos de un Padre ; por lo cual El no se avergüenza de llamarlos hermanos,
diciendo: Anunciare tu nombre a mis hermanos, en medio de la congregacionte cantare himnos.
Y otra vez: Yo en El confiare. Y otra vez: He aqui, yo y los hijos que Dios me ha dado.
y librar a los que por el temor a la muerte, estaban sujetos a esclavitud durante toda la vida.
Porque ciertamente no ayuda a los ángeles, sino que ayuda a la descendencia de Abraham.
Por tanto, tenÃa que ser hecho semejante a sus hermanos en todo, a fin de que llegara a ser un misericordioso y fiel sumo sacerdote en las cosas que a Dios atañen, para hacer propiciación por los pecados del pueblo.
Pues por cuanto El mismo fue tentado en el sufrimiento, es poderoso para socorrer a los que son tentados.