Have not I commanded thee? Be strong and of a good courage; be not afraid, neither be thou dismayed: for the LORD thy God is with thee whithersoever thou goest.
Entonces le rogaba con insistencia que no los enviara fuera de la tierra.
Y habÃa allà una gran piara de cerdos paciendo junto al monte.
Y los demonios le rogaron, diciendo: EnvÃanos a los cerdos para que entremos en ellos.
Y El les dio permiso. Y saliendo los espÃritus inmundos, entraron en los cerdos; y la piara, unos dos mil, se precipitó por un despeñadero al mar, y en el mar se ahogaron.
Y vinieron a Jesús, y vieron al que habÃa estado endemoniado, sentado, vestido y en su cabal juicio, el mismo que habÃa tenido la legión; y tuvieron miedo.
Y los que lo habÃan visto les describieron cómo le habÃa sucedido esto al endemoniado, y lo de los cerdos.
Y comenzaron a rogarle que se fuera de su comarca.
Al entrar El en la barca, el que habÃa estado endemoniado le rogaba que lo dejara acompañarle.
Y se burlaban de El. Pero El, echando fuera a todos, tomó consigo al padre y a la madre de la niña, y a los que estaban con El, y entró donde estaba la niña.
Y tomando a la niña por la mano, le dijo: Talita cum (que traducido significa: Niña, a ti te digo, ¡levántate!).
Al instante la niña se levantó y comenzó a caminar, pues tenÃa doce años. Y al momento se quedaron completamente atónitos.
Entonces les dio órdenes estrictas de que nadie se enterara de esto; y dijo que le dieran de comer a la niña.