"Para la matanza ha sido afilada, para brillar como el rayo ha sido pulida." ¿Acaso hemos de alegrarnos, cuando el cetro de mi hijo desprecia toda vara?
Es dada para que sea pulida, para que sea empuñada; ha sido afilada la espada, ha sido pulida, para ponerla en manos del matador.
Tú, pues, hijo de hombre, profetiza y bate palmas; sea la espada duplicada y triplicada, la espada para los muertos. Es la espada de la gran vÃctima, que los tiene rodeados,
para que sus corazones se acobarden y caigan muchos. En todas sus puertas he puesto la espada reluciente. ¡Ah!, hecha para centellear, pulida para la matanza.
Y tú, hijo de hombre, traza dos caminos por donde venga la espada del rey de Babilonia; ambos saldrán de una misma tierra. Haz una señal y ponla al comienzo del camino a la ciudad.
Y tú, hijo de hombre, profetiza y di: "Asà dice el Señor Dios acerca de los hijos de Amón y de su oprobio". Dirás: "La espada, la espada está desenvainada, para la matanza está pulida, para hacer exterminio, para centellear
(mientras ellos ven para ti visiones falsas, mientras adivinan para ti mentiras), para ponerla sobre los cuellos de los infames malvados cuyo dÃa ha llegado en la hora del castigo final.