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Trust in the LORD with all thine heart; and lean not unto thine own understanding.

Proverbs: 3:5

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Â¿Por quÃ© no se reserva los tiempos el Todopoderoso, y por quÃ© no ven sus dÃas los que le conocen?

Algunos quitan los linderos, roban y devoran los rebaÃ±os.

Se llevan los asnos de los huÃ©rfanos, toman en prenda el buey de la viuda.

Apartan del camino a los necesitados, hacen que se escondan enteramente los pobres de la tierra.

He aquÃ, como asnos monteses en el desierto, salen con afÃ¡n en busca de alimento y de pan para sus hijos en el yermo.

Cosechan su forraje en el campo, y vendimian la viÃ±a del impÃo.

Pasan la noche desnudos, sin ropa, y no tienen cobertura contra el frÃo.

Mojados estÃ¡n con los aguaceros de los montes, y se abrazan a la peÃ±a por falta de abrigo.

Otros arrancan al huÃ©rfano del pecho, y contra el pobre exigen prenda.

Hacen que el pobre ande desnudo, sin ropa, y al hambriento quitan las gavillas.

Entre sus paredes producen aceite; pisan los lagares, pero pasan sed.

Desde la ciudad gimen los hombres, y claman las almas de los heridos, pero Dios no hace caso a su oraciÃ³n.

Otros han estado con los que se rebelan contra la luz; no quieren conocer sus caminos, ni morar en sus sendas.

Al amanecer se levanta el asesino; mata al pobre y al necesitado, y de noche es como un ladrÃ³n.

El ojo del adÃºltero espera el anochecer, diciendo: "NingÃºn ojo me verÃ¡", y disfraza su rostro.

En la oscuridad minan las casas, y de dÃa se encierran; no conocen la luz.

Sobre la superficie de las aguas son insignificantes; maldita es su porciÃ³n sobre la tierra, nadie se vuelve hacia las viÃ±as.

La sequÃa y el calor consumen las aguas de la nieve, y el Seol a los que han pecado.

La madre lo olvidarÃ¡; el gusano lo saborearÃ¡ hasta que nadie se acuerde de Ã©l, y la iniquidad serÃ¡ quebrantada como un Ã¡rbol.

Pero El arrastra a los poderosos con su poder; cuando se levanta, nadie estÃ¡ seguro de la vida.

Les provee seguridad y son sostenidos, y los ojos de El estÃ¡n en sus caminos.

Son exaltados por poco tiempo, despuÃ©s desaparecen; ademÃ¡s son humillados y como todo, recogidos; como las cabezas de las espigas son cortados.