Likewise the Spirit also helpeth our infirmities: for we know not what we should pray for as we ought: but the Spirit itself maketh intercession for us with groanings which cannot be uttered.
La destrucción de OcozÃas vino de Dios, por ir a visitar a Joram. Pues cuando llegó, salió con Joram contra Jehú, hijo de Nimsi, a quien el Señor habÃa ungido para exterminar la casa de Acab.
Y sucedió que cuando Jehú estaba ejecutando justicia contra la casa de Acab, encontró a los prÃncipes de Judá y a los hijos de los hermanos de OcozÃas sirviendo a OcozÃas, y los mató.