Soy el azafrán de primavera que florece en la llanura Sarón,    el lirio del valle.
Como un lirio entre los cardos    es mi amada entre las jóvenes.
Como el manzano más selecto del huerto    es mi amante entre los jóvenes. Me siento bajo su sombra placentera    y saboreo sus deliciosos frutos.
Él me escolta hasta la sala de banquetes;    es evidente lo mucho que me ama.
¡Ay, oigo que viene mi amado!    Viene saltando por las montañas,    brincando por las colinas.
Mi amante es como una gacela veloz    o un venado joven. ¡Miren! Allà está, detrás del muro,    asomándose por la ventana,    mirando dentro de la habitación.
Mi amante me dijo:    «¡Levántate, amada mÃa!    ¡Ven conmigo, mi bella mujer!
Mira, el invierno se acabó    y las lluvias ya pasaron.
Las flores están brotando,    ha llegado la temporada de los pájaros cantores;    y el arrullo de las tórtolas llena el aire.
Las higueras comienzan a formar su fruto,    y las vides fragantes están en flor. ¡Levántate, amada mÃa!    ¡Ven conmigo, mi bella mujer!».
Atrapen todos los zorros,    esos zorros pequeños, antes de que arruinen el viñedo del amor,    ¡porque las vides están en flor!
Mi amado es mÃo, y yo soy suya.    Él apacienta entre los lirios.
Antes de que soplen las brisas del amanecer    y huyan las sombras de la noche, regresa a mÃ, amor mÃo, como una gacela    o un venado joven sobre montes empinados.