Disciplina a tus hijos mientras haya esperanza;    de lo contrario, arruinarás sus vidas.
Los que pierden los estribos con facilidad tendrán que sufrir las consecuencias.    Si los proteges de ellas una vez, tendrás que volver a hacerlo.
Consigue todo el consejo y la instrucción que puedas,    para que seas sabio por el resto de tu vida.
Puedes hacer todos los planes que quieras,    pero el propósito del Señor prevalecerá.
Lo que hace atractiva a una persona es su lealtad. Â Â Â Es mejor ser pobre que deshonesto.
El temor del Señor conduce a la vida;    da seguridad y protección contra cualquier daño.
Los perezosos toman la comida en la mano, Â Â Â pero ni siquiera se la llevan a la boca.
Si castigas al burlón, los ingenuos aprenderán una lección;    si corriges al sabio, será aún más sabio.
Los hijos que maltratan a su padre o echan fuera a su madre    son una deshonra pública y una vergüenza.
Hijo mÃo, si dejas de escuchar la instrucción,    le darás la espalda al conocimiento.
Un testigo corrupto ridiculiza la justicia; Â Â Â la boca del perverso se traga de golpe la maldad.
El castigo está hecho para los burlones,    y la espalda de los necios, para recibir golpes.