Reunió una fuerza de setenta mil obreros, ochenta mil hombres para extraer piedras de las canteras en la zona montañosa y tres mil seiscientos capataces.
En respuesta, el rey Hiram le envió a Salomón la siguiente carta:«¡Es porque el Señor ama a su pueblo que te ha hecho rey de los israelitas!
¡Alaben al Señor, Dios de Israel, quien hizo los cielos y la tierra! Él le dio al rey David un hijo sabio, dotado de capacidad y entendimiento, quien construirá un templo para el Señor y un palacio real para sà mismo.
»Te envÃo un maestro artesano llamado Huram-abÃ, un hombre sumamente talentoso.
Luego Salomón levantó un censo de todos los extranjeros que vivÃan en la tierra de Israel, tal como el censo que habÃa hecho su padre, y contó ciento cincuenta y tres mil seiscientos extranjeros.
Asignó a setenta mil como obreros, a ochenta mil como cortadores de piedra en la zona montañosa y a tres mil seiscientos como capataces.