pero el altar de bronce hecho por Bezalel, hijo de Uri y nieto de Hur, estaba allà en Gabaón frente al tabernáculo del Señor. Asà que Salomón y el pueblo se reunieron en ese lugar para consultar al Señor.
AllÃ, frente al tabernáculo, Salomón subió hasta el altar de bronce en la presencia del Señor y sacrificó sobre el altar mil ofrendas quemadas.
Salomón le contestó a Dios:—Tú mostraste fiel amor a David, mi padre, y ahora me has hecho rey en su lugar.
Oh Señor Dios, ¡te ruego que sigas manteniendo la promesa que le hiciste a David mi padre, pues me has hecho rey sobre un pueblo tan numeroso como el polvo de la tierra!
Dios le dijo a Salomón:—Por cuanto tu mayor deseo es ayudar a tu pueblo, y no pediste abundancia ni riquezas ni fama ni siquiera la muerte de tus enemigos o una larga vida, sino que has pedido sabidurÃa y conocimiento para gobernar a mi pueblo como es debido,