Este es el número de los descendientes de Aarón (los sacerdotes) y de los levitas que fueron convocados:
del clan de Coat, 120, con Uriel como su jefe;
del clan de Merari, 220, con AsaÃas como su jefe;
del clan de Gerson, 130, con Joel como su jefe;
de los descendientes de Elizafán, 200, con SemaÃas como su jefe;
de los descendientes de Hebrón, 80, con Eliel como su jefe;
de los descendientes de Uziel, 112, con Aminadab como su jefe.
Luego David mandó llamar a los sacerdotes, Sadoc y Abiatar, y a los siguientes jefes levitas: Uriel, AsaÃas, Joel, SemaÃas, Eliel y Aminadab.
Les dijo: «Ustedes son los jefes de las familias levitas. Deben purificarse ustedes mismos y a todos los demás levitas, a fin de que puedan traer el arca del Señor, Dios de Israel, al lugar que le he preparado.
Como no fueron ustedes, los levitas, los que llevaban el arca la primera vez, el enojo del Señor nuestro Dios se encendió contra nosotros. No habÃamos consultado a Dios acerca de cómo trasladarla de la manera apropiada».
De modo que los levitas nombraron a Hemán, hijo de Joel, junto con sus hermanos levitas: Asaf, hijo de BerequÃas, y Etán, hijo de CusaÃas, del clan de Merari.
Los siguientes hombres fueron elegidos como sus ayudantes: ZacarÃas, Jaaziel, Semiramot, Jehiel, Uni, Eliab, BenaÃa, MaaseÃas, MatatÃas, Elifelehu, MicnÃas y los porteros Obed-edom y Jeiel.
Los músicos Hemán, Asaf y Etán fueron elegidos para hacer resonar los cÃmbalos de bronce.
ZacarÃas, Aziel, Semiramot, Jehiel, Uni, Eliab, MaaseÃas y BenaÃa fueron elegidos para tocar las arpas.
MatatÃas, Elifelehu, MicnÃas, Obed-edom, Jeiel y AzazÃas fueron elegidos para tocar las liras.
QuenanÃas, el jefe de los levitas, fue seleccionado por su habilidad para dirigir el coro.
BerequÃas y Elcana fueron elegidos para vigilar el arca.