Tú has hecho cosas más malignas que todos los que vivieron antes de ti. Te has hecho otros dioses y me has enfurecido con tus becerros de oro. Como me has dado la espalda,
A los miembros de la familia de Jeroboam que mueran en la ciudad, se los comerán los perros y a los que mueran en el campo se los comerán los buitres. Yo, el Señor, he habladoâ€Â».
Todo Israel llorará su muerte y lo enterrará. Él será el único miembro de tu familia que tendrá un entierro apropiado, porque este niño es lo único bueno que ve el Señor, Dios de Israel, en toda la familia de Jeroboam.
»Además, el Señor levantará un rey sobre Israel que destruirá a la familia de Jeroboam. Esto sucederá hoy, ¡ahora mismo!
Luego el Señor sacudirá a Israel como la corriente agita los juncos. Él desarraigará a los israelitas de esta buena tierra que les dio a sus antepasados y los esparcirá más allá del rÃo Éufrates, porque ellos han enfurecido al Señor con los postes que levantaron para rendir culto a la diosa Asera.
Durante el reinado de Roboam, los habitantes de Judá hicieron lo malo a los ojos del Señor, y provocaron su enojo con los pecados que cometieron, pues eran aún peores que los pecados de sus antepasados.
Hasta habÃa prostitutos y prostitutas de los santuarios paganos por todo el territorio. La gente imitó las prácticas detestables de las naciones paganas que el Señor habÃa expulsado de la tierra del paso de los israelitas.
Cuando Roboam murió, lo enterraron junto a sus antepasados en la Ciudad de David. Su madre fue una mujer amonita llamada Naama. Luego su hijo Abiam lo sucedió en el trono.