But now thus saith the LORD that created thee, O Jacob, and he that formed thee, O Israel, Fear not: for I have redeemed thee, I have called thee by thy name; thou art mine.
Entonces toda la congregación habló de apedrearlos. Pero la gloria de Jehovah se dejó ver en el tabernáculo de reunión ante todos los hijos de Israel.
Y lo contarán a los habitantes de esta tierra, los cuales han oÃdo que tú, oh Jehovah, estás en medio de este pueblo; que te dejas ver cara a cara, oh Jehovah, y que tu nube está sobre ellos. Han oÃdo que tú vas delante de ellos, de dÃa en una columna de nube, y de noche en una columna de fuego.
Pero si tú haces morir a este pueblo como a un solo hombre, entonces las naciones que han oÃdo de tu fama dirán:
"Porque Jehovah no fue capaz de introducir a ese pueblo en la tierra que les prometió con juramento, por eso los mató en el desierto."
Ahora pues, sea engrandecido el poder del Señor, de acuerdo con lo que has hablado diciendo:
"Jehovah es lento para la ira y grande en misericordia. Él perdona la iniquidad y la rebelión, pero de ninguna manera dará por inocente al culpable. Castiga la maldad de los padres sobre los hijos, sobre la tercera y sobre la cuarta generación."
Perdona, pues, la iniquidad de este pueblo según la grandeza de tu misericordia, como lo has perdonado desde Egipto hasta aquÃ.
Entonces Jehovah dijo: --Yo lo he perdonado, conforme a tu palabra.
Sin embargo, vivo yo, y la gloria de Jehovah llena toda la tierra,
que de los que vieron mi gloria y las señales que hice en Egipto y en el desierto, y que me han puesto a prueba ya diez veces y no han escuchado mi voz, ninguno
verá la tierra que prometà con juramento a sus padres. Ninguno de los que me han menospreciado la verá.
--¿Hasta cuándo he de soportar a esta perversa congregación que se queja contra mÃ? ¡Yo he oÃdo las quejas que los hijos de Israel hacen contra mÃ!
En cuanto a vosotros, vuestros cadáveres caerán en este desierto.
Vuestros hijos andarán errantes en el desierto durante 40 años. Ellos llevarán la paga de vuestras infidelidades hasta que vuestros cadáveres sean consumidos en el desierto.
Entonces descendieron los amalequitas y los cananeos que habitaban en aquella región montañosa, y los hirieron y los destrozaron hasta llegar a Horma.