"Decid a vuestros hermanos: AmmÃ, y a vuestras hermanas: Rujama.
"¡Acusad a vuestra madre, acusadla! Porque ella ya no es mi mujer, ni yo soy su marido. Que quite sus fornicaciones de delante de su cara y sus adulterios de entre sus pechos.
No sea que yo la desnude por completo y la ponga como en el dÃa en que nació. No sea que la vuelva como un desierto, que la deje como una tierra reseca y la mate de sed.
"Pero ella no reconoció que era yo el que le daba el trigo, el vino nuevo y el aceite. Yo le di abundancia de plata y de oro, que ellos usaron para Baal.