¡Oh, cómo quisiera que fueses mi hermano, que mamó los pechos de mi madre! AsÃ, al encontrarte afuera, yo te besarÃa sin que nadie me menospreciara.
Yo te llevarÃa y te meterÃa en la casa de mi madre, y tú me enseñarÃas. Y yo te harÃa beber vino aromático y jugo de granadas.
Su brazo izquierdo está debajo de mi cabeza, y su derecho me abraza.
Ponme como sello sobre tu corazón, como sello sobre tu brazo. Porque fuerte como la muerte es el amor; inconmovible como el Seol es la pasión. Sus brasas son brasas de fuego; es como poderosa llama.
Las poderosas aguas no pueden apagar el amor, ni lo pueden anegar los rÃos. Si el hombre diese todas las riquezas de su casa para comprar el amor, de cierto lo despreciarÃan.