Paul, an apostle of Jesus Christ by the will of God, and Timothy our brother, unto the church of God which is at Corinth, with all the saints which are in all Achaia:
Entonces le dio EzequÃas toda la plata que se hallaba en la casa de Jehovah y en los tesoros de la casa del rey.
En aquel tiempo EzequÃas desmanteló las puertas del templo de Jehovah y sus marcos, que el mismo EzequÃas, rey de Judá, habÃa recubierto de oro, y se los dio al rey de Asiria.
Luego llamaron al rey, y salieron hacia ellos Eliaquim hijo de HilquÃas, el administrador del palacio; Sebna, el escriba; y Jóaj hijo de Asaf, el cronista.
¿Cómo podrás resistir a un oficial de uno de los más insignificantes servidores de mi señor, confiando en Egipto por carros y jinetes?
Y ahora, ¿acaso he subido contra este lugar para destruirlo sin que haya intervenido Jehovah? Jehovah me ha dicho: "Sube contra esa tierra y destrúyela."
Entonces Eliaquim hijo de HilquÃas, Sebna y Jóaj dijeron al Rabsaces: --Por favor, habla a tus siervos en arameo, porque nosotros lo entendemos. No hables con nosotros en hebreo, a oÃdos del pueblo que está sobre la muralla.
Tampoco os haga confiar EzequÃas en Jehovah, diciendo: 'Ciertamente Jehovah nos librará, y esta ciudad no será entregada en mano del rey de Asiria.'"
Pero el pueblo calló y no le respondió ni una palabra, porque habÃa una orden del rey que decÃa: "No le respondáis."
Entonces Eliaquim hijo de HilquÃas, el administrador del palacio; Sebna, el escriba; y Jóaj hijo de Asaf, el cronista, fueron a EzequÃas con sus vestiduras rasgadas, y le declararon las palabras del Rabsaces.