Be merciful unto me, O God, be merciful unto me: for my soul trusteth in thee: yea, in the shadow of thy wings will I make my refuge, until these calamities be overpast.
pues ustedes ya conocen la gracia de nuestro Señor Jesucristo que, por amor a ustedes, siendo rico se hizo pobre, para que con su pobreza ustedes fueran enriquecidos.
Y ahora, por el bien de ustedes, les doy mi opinión sobre este asunto. Desde el año pasado, ustedes no sólo fueron los primeros en hacer algo sino que deseaban hacerlo;
asà que ahora, dentro de sus posibilidades, lleven a cabo lo que ya estaban dispuestos a hacer.
Porque si hay buena disposición, lo que se da es bien recibido, según lo que uno tiene y no según lo que no tiene.
No digo esto para que otros tengan demasiado mientras ustedes sufren de escasez,
sino para que en este tiempo la abundancia de ustedes supla, con igualdad, la escasez de ellos, y para que la abundancia de ellos supla la necesidad de ustedes. De este modo habrá igualdad,
como está escrito: «El que recogió mucho, no tuvo más, y el que recogió poco, no tuvo menos.»
Gracias a Dios, que puso en el corazón de Tito la misma preocupación por ustedes;
pues, a decir verdad, aceptó nuestra exhortación, pero estaba más que listo para ir a verlos, y por su propia voluntad.