Have not I commanded thee? Be strong and of a good courage; be not afraid, neither be thou dismayed: for the LORD thy God is with thee whithersoever thou goest.
Allà estaba el pozo de Jacob, y como Jesús estaba cansado del camino, se sentó allÃ, junto al pozo. Eran casi las doce del dÃa.
Una mujer de Samaria vino a sacar agua, y Jesús le dijo: «Dame de beber.»
Y es que sus discÃpulos habÃan ido a la ciudad para comprar de comer.
La samaritana le dijo: «¿Y cómo es que tú, que eres judÃo, me pides de beber a mÃ, que soy samaritana?» Y es que los judÃos y los samaritanos no se tratan entre sÃ.
Los discÃpulos se decÃan unos a otros: «¿Alguien le habrá traÃdo algo para comer?»
Jesús les dijo: «Mi comida es hacer la voluntad del que me envió, y llevar a cabo su obra.
¿Acaso no dicen ustedes: “Aún faltan cuatro meses para el tiempo de la siega� Pues yo les digo: Alcen los ojos, y miren los campos, porque ya están blancos para la siega.
Y el que siega recibe su salario y recoge fruto para vida eterna, para que se alegren por igual el que siembra y el que siega.
Porque en este caso es verdad lo que dice el dicho: “Uno es el que siembra, y otro es el que siega.â€
Yo los he enviado a segar lo que ustedes no cultivaron; otros cultivaron, y ustedes se han beneficiado de sus trabajos.»