Paul, an apostle of Jesus Christ by the will of God, and Timothy our brother, unto the church of God which is at Corinth, with all the saints which are in all Achaia:
Faltaban dos dÃas para la pascua y para la fiesta de los panes sin levadura. Por medio de engaños, los principales sacerdotes y los escribas buscaban la manera de arrestar a Jesús para matarlo.
Pero decÃan: «No lo haremos durante la fiesta, para que no se alborote el pueblo.»
Judas Iscariote, que era uno de los doce, fue a hablar con los principales sacerdotes para entregarles a Jesús.
Cuando ellos lo oyeron, se alegraron y prometieron darle dinero. Y Judas comenzó a buscar el mejor momento de entregarlo.
El primer dÃa de la fiesta de los panes sin levadura, que es cuando se sacrifica el cordero de la pascua, sus discÃpulos le preguntaron: «¿Dónde quieres que hagamos los preparativos para que comas la pascua?»
Jesús envió a dos de sus discÃpulos. Les dijo: «Vayan a la ciudad, y les saldrá al encuentro un hombre que lleva un cántaro de agua. SÃganlo,
Se fue un poco más adelante y, postrándose en tierra, oró que, de ser posible, no tuviera que pasar por ese momento.
DecÃa: «¡Abba, Padre! Para ti, todo es posible. ¡Aparta de mà esta copa! Pero que no sea lo que yo quiero, sino lo que quieres tú.»
Volvió luego a donde estaban sus discÃpulos, y los encontró dormidos. Entonces le dijo a Pedro: «¿Duermes, Simón? ¿No has podido mantenerte despierto ni una hora?
Cuando volvió la tercera vez, les dijo: «Sigan durmiendo y descansando. ¡Ya basta! La hora ha llegado. ¡Miren al Hijo del Hombre, que es entregado en manos de los pecadores!
¡Vamos, levántense, que ya se acerca el que me traiciona!»
Pedro comenzó entonces a maldecir y a jurar: «¡Yo no conozco a ese hombre, del que ustedes hablan!»
En ese mismo instante el gallo cantó por segunda vez. Entonces Pedro se acordó de lo que Jesús le habÃa dicho: «Antes de que el gallo cante dos veces, tú me habrás negado tres veces.» Y al pensar en esto, se echó a llorar.