Though I walk in the midst of trouble, thou wilt revive me: thou shalt stretch forth thine hand against the wrath of mine enemies, and thy right hand shall save me.
y les dijo: «Vayan a la aldea que tienen ante ustedes. Al entrar en ella, van a encontrar atado un burrito, sobre el cual nadie se ha montado. Desátenlo y tráiganlo acá.
Al dÃa siguiente, cuando salieron de Betania, Jesús tuvo hambre.
Al ver de lejos una higuera con hojas, fue a ver si hallaba en ella algún higo; pero al llegar no encontró en ella más que hojas, pues no era el tiempo de los higos.
Entonces Jesús le dijo a la higuera: «¡Que nadie vuelva a comer fruto de ti!» Y sus discÃpulos lo oyeron.
y no permitÃa que nadie atravesara el templo llevando algún utensilio;
más bien, les enseñaba y les decÃa: «¿Acaso no está escrito: “Mi casa será llamada casa de oración para todas las nacionesâ€? ¡Pero ustedes han hecho de ella una cueva de ladrones!»
Cuando los escribas y los principales sacerdotes lo oyeron, comenzaron a buscar la manera de matarlo. Y es que le tenÃan miedo, pues toda la gente estaba admirada de sus enseñanzas.
Pero al llegar la noche, Jesús salió de la ciudad.