Though I walk in the midst of trouble, thou wilt revive me: thou shalt stretch forth thine hand against the wrath of mine enemies, and thy right hand shall save me.
»A cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mÃ, más le valdrÃa que le colgaran al cuello una piedra de molino, y que lo hundieran en el fondo del mar.
»Tengan cuidado de no menospreciar a uno de estos pequeños, porque yo les digo que sus ángeles en los cielos ven siempre el rostro de mi Padre que está en los cielos.
Porque el Hijo del Hombre ha venido a salvar lo que se habÃa perdido.
Cuando aquel siervo salió, se encontró con uno de sus consiervos, que le debÃa cien dÃas de salario, y agarrándolo por el cuello le dijo: “Págame lo que me debes.â€