¡Que se despierten las naciones y suban al valle de Josafat! Yo voy a sentarme allà para juzgar a todas las naciones de alrededor.
¡Echen mano a la hoz, que la mies ya está madura! ¡Vengan acá, que el lagar está rebosante! ¡Llenen las cubas, que ya es demasiada la maldad de ellos!»
Son muchos los pueblos en el valle de la decisión, porque ya se acerca el dÃa del Señor en el valle de la decisión.
El sol y la luna se oscurecerán, y las estrellas opacarán su resplandor.
Cuando llegue ese momento, los montes destilarán mosto, por las colinas fluirá leche, y por todos los arroyos de Judá correrán aguas. En la casa del Señor brotará un manantial, que regará el valle de SitÃn.
Por causa de la injuria inferida a los hijos de Judá, Egipto será destruido, y Edom quedará hecho un desierto desolado, pues en su tierra derramaron sangre inocente.