Cuando Isboset hijo de Saúl supo que habÃan matado a Abner en Hebrón, se angustió, y todo el pueblo de Israel se llenó de temor.
Isboset contaba con dos hombres de su confianza, que estaban al frente de unos grupos de bandoleros; uno de ellos se llamaba Baná, y el otro Recab, y los dos eran hijos de un benjaminita de Berot llamado Rimón. (A Berot se le consideraba parte de la tribu de BenjamÃn.
Los habitantes de Berot habÃan huido a Guitayin, y hasta la fecha viven allà como forasteros.)
y la portera de Isboset, que habÃa estado limpiando el trigo, se habÃa quedado dormida. Recab y su hermano Baná aprovecharon esto y se metieron a la casa.
Al entrar y ver que Isboset dormÃa la siesta, lo mataron y le cortaron la cabeza, y llevándosela con ellos caminaron toda esa noche por el camino del Arabá.
Luego, al llegar a Hebrón, le entregaron la cabeza al rey David y le dijeron:«Aquà tienes la cabeza de tu enemigo Isboset, el hijo de Saúl, que te querÃa matar. En este dÃa el Señor ha permitido a Su Majestad vengarse de Saúl y de su descendencia.»
Pero David les respondió:«Juro por el Señor, que me ha librado de toda angustia,
Dicho esto, David ordenó a sus siervos que les dieran muerte, y ellos asà lo hicieron, y además les cortaron las manos y los pies, y los colgaron junto al estanque de Hebrón; luego tomaron la cabeza de Isboset y la enterraron en el sepulcro de Abner, en Hebrón.