Jacob levantó la vista, y vio que Esaú venÃa acompañado de cuatrocientos hombres. Entonces repartió a los niños entre Lea y Raquel y las dos siervas,
Y Esaú dijo:«Yo tengo ya demasiado, hermano mÃo. Lo que es tuyo, es tuyo.»
Pero Jacob respondió:«¡No, por favor! Si me he ganado tu buena voluntad, acepta mi presente. El ver tu rostro es como haber visto el rostro de Dios. Tú me has mostrado tu buena voluntad.
Acepta, por favor, el presente que te he traÃdo. Dios ha sido muy bueno conmigo, y todo esto es mÃo.»Y tanto le insistió Jacob, que Esaú lo aceptó.